sábado, 22 de septiembre de 2007

A veces...


A veces siento que les he fallado a todos, que he dado menos de lo que todos merecen, menos tiempo, menos sonrisas, menos compañía, menos abrazos, besos, palabras...

A veces creo que los demás no comprenden lo que me pasa...

Algunas muchas veces mas creo que todo es un alucine que hay que dejar atás por la amplia comprensión de mis seres amados, queridos, adorados...

Y otras tantas veces más siento que no puedo dejar de pensar en lo anterior.

1 comentario:

Franz J Fortuny dijo...

Mi esposa siempre me llama la atención porque pienso en algo todo el tiempo. Ella dice que debo dejar de pensar. Que si no puedo dejar mi mente en blanco, siempre voy a tener menos capacidad de meditar. Y que sólo cuando se entra en estado de meditación puede uno realmente aprender de sí mismo. Siempre me suena extraño que dejes de pensar para poder... ¡pensar! Es decir, sabre sobre sí mismo necesariamente implica analizarse y para ello hay que pensar. Pero me dicen que siempre no, que no piense, para que así pueda meditar. Bueno, allí lo dejo. Yo aún no lo entiendo muy bien, pero es la idea. No pensar, meditar, dejar la mente en blanco. Supongo que con la mente en blanco la hipótesis es que se opone menos resistencia a la entrada de las imágenes libres del universo. ¿Será?

La verdad es que dejar la mente en blanco ES DIFÍCIL. Muy, pero muy difícil. Trata de hacerlo por un rato y verás cómo te llenas de pensamientos de inmediato.

Es sólo una idea.